¿Cómo se fijan los precios?

Por - ACEI
02/16/2023 10:20 AM

    Una de las grandes dudas de todo consumidor, es saber cómo se fijan los precios de los productos, sobre todo cuando aumentan muy rápido y a escalas importantes. La mayoría piensa que se trata de acciones especulativas por parte de los comerciantes, pero en realidad es una situación más compleja que trataremos de abordar a continuación.

    Para comenzar, es necesario comprender algunos conceptos básicos de economía. Cuando hablamos de Mercado, nos referimos al conjunto de transacciones que se desarrollan en un espacio, lugar o momento entre los agentes económicos, es decir el intercambio comercial entre quienes ofrecen algo y quienes desean obtenerlo.


    Así que va más allá del supermercado o comercio para obtener productos terminados, también forma parte del mercado la obtención de la materia prima, el transporte, el procesamiento para su transformación y la distribución hacia el consumidor directo. Esto nos da algunas luces sobre el precio del producto final, porque en cada fase de esta cadena hay un costo que, nos guste o no, forma parte del precio que como consumidores debemos pagar por el producto terminado.


Sobre los Mercados

   Los Mercados se pueden clasificar, dependiendo del modelo económico imperante. Existe la Economía de Libre Mercado, Economía de Mercado Cerrado y Economía Planificada.


    Las economías de Libre Mercado hacen referencia a aquellas economías en donde los precios vienen determinados principalmente por la relación entre la oferta y la demanda, es decir, a los acuerdos entre quienes ofrecen el producto/servicio y los que están dispuestos a pagar por él. El Estado no interviene o tiene una escasa participación. Es por ello que cuando un producto abunda en el mercado, sus precios tienden a bajar para volverse atractivo al consumidor, quien tiene de donde escoger. Pero si el producto es escaso, entonces el precio aumenta, porque el consumidor está dispuesto a pagar lo necesario y quizás más, por obtenerlo.


    Por otro lado, en las Economías Planificadas el establecimiento de los precios obedece a decisiones gubernamentales, que define no solo el precio del producto sino el volumen de producción y la forma de distribución, hacia quienes y en qué momento. En este sentido, el qué, el cómo y el para quién producir, y su precio, son decisiones tomadas desde el poder central, el Estado es el ente regulador que bajo su óptica, entiende cuáles son las prioridades y actúa en consecuencia.


    Las Economías Cerradas desestiman la posibilidad de intercambio comercial entre el Estado (sector público) con otras naciones, la importación y la exportación no forma parte de sus estrategias económicas, priorizando más bien la autarquía, es decir, producir todo lo que se consuma y consumir solo lo que se produce. También incluye la imposibilidad de adquirir mano de obra extranjera.  En este caso el Estado interviene de forma moderada para establecer reglas de juego para una saludable relación de oferta y demanda, y permitir que el sector privado sea quien crea y desarrolle mercados abiertos.

    A continuación, un cuadro resumen de las características de los Mercados.


     Sobre los Precios


    Ahora que tenemos claro las diferencias entre los mercados, podemos descartar a las Economías Planificadas en los procesos de fijación de precios. En las economías de Libre Mercado y Cerradas, la oferta y demanda son cruciales con la gran diferencia de que en la primera no hay regulación del Estado y en la segunda si lo hay. Fuera de ello, los procedimientos son más o menos iguales.

El Precio es el valor monetario asignado a un producto/servicio ofrecido al consumidor. Para determinar el valor de tu producto es necesario revisar los siguientes pasos:

  1. Identifica y analiza la dinámica del mercado al que te quieres dirigir: conoce a quiénes vas a satisfacer sus necesidades y si efectivamente, tu producto es capaz de resolver esas necesidades. También debes evaluar si cuentas con el grupo etario adecuado y su comportamiento.
  2. Analiza y evalúa a tus competidores: qué ofrecen ellos y en cuánto lo ofrecen, la calidad de su producto también es importante conocer para que puedas incorporar un valor agregado al tuyo
  3. Analiza tu producto/servicio: si es para satisfacer una necesidad inmediata, entonces no es duradero, se consume de forma rápida y por lo tanto su precio no puede ser muy alto. Pero si está destinado a satisfacer una necesidad por largo tiempo, entonces ocurre lo contrario
  4. Determina los costos fijos y variables: los costos fijos son aquellos que cubres mes a mes y que son necesarios para producir el bien que vas a ofrecer y pueda mantenerse en el mercado, pero no inciden en el nivel de producción. Los costos variables están relacionados con la productividad, con el volumen de producción, materia prima, etc. Son variables porque los costos de la materia prima e insumos pueden variar, así como puede variar el volumen que decidas generar.
  5. Establece el margen de utilidad o ganancia: la legislación venezolana especifica que la ganancia debe ser del 30%, una vez cubierto los costos fijos y variables. No olvides agregar los salarios, incluyendo el tuyo.
  6. Analiza cuál es tu propuesta de valor: si ya has revisado a tu competencia, sabrás que están ofreciendo y podrás hallar algo que ofrecer que no tengan los demás. Esto puede contribuir a darle un precio a tu producto, por encima de la media

    Estos pasos son generales, peros existen estrategias más específicas para fijar precios, que abordaremos en el siguiente artículo.


    Para cerrar


        Hay que acotar que en la actualidad no existen economías sin intervención del Estado. De alguna manera el Estado se hace presente ya sea como ente regulador o como participante directo en las transacciones, o ambas.


        Esto se debe a que es difícil garantizar transparencia, evitar especulaciones, surgimiento de monopolios y otras irregularidades, si las reglas de juego no están claras, y no haya quién supervise la legitimidad de los intercambios. Por otro lado, una economía con alta intervención estatal atenta contra la competencia, impide la oxigenación del mercado y conduce a desabastecimiento.


        A la larga, fijar los precios de los productos debe ser una acción equilibrada que tome en consideración la posibilidad de que como oferentes y/o consumidores, ganemos todos.

     

    ACEI